El “acabado a mano” tiene una connotación con la calidad suprema, no está lejos de serlo. Existe una gama muy amplia de decoraciones que permiten una belleza estética e incluso funcionalidad.
¿Qué significa el “acabado a mano”?
Es una fina ornamentación y sutiles adornos que los relojeros realizan a mano, el esmero y cuidado está de sobra mencionar. Algunos procesos incluyen maquinaria en las primeras etapas, después pasan a las manos de los artesanos relojeros para dar un toque final, el sello de cada casa relojera.
Ese acabado remueve cualquier rebaba o partículas que la máquina no ha podido hacer. También se suavizan los bordes con la finalidad de crear una pieza impecable. Existen marcas que se distinguen por ello, Patek Philippe, Jaeger-LeCoultre, A. Lange & Söhne, Vacheron Constantin y por supuestos algunas pequeñas marcas que se permiten una diminuta producción por enfocarse en los retos mecánicos y el cuidado en el acabado.
El “acabado a mano” asegura un funcionamiento perfecto por muchos años, lograrlo no es fácil se necesita un dominio de técnicas centenarias y una gran destreza para trabajar en pequenísimos detalles, incluso lo que se requiere una lupa para distinguir.
Esmalte, engaste de piedras, o algunas partes del reloj como la caja que en este caso le llaman “refinado”, en fin, el proceso de fabricación es una delicia.