Perrelet presenta nuevas versiones de su emblemática Turbine Lady: un reloj diferente con proporciones completamente rediseñadas. Y por primera vez, se presenta con un brazalete de acero para reforzar su carácter deportivo-chic. Para todas las mujeres apasionadas por la micromecánica que desean afirmar su feminidad.
Si tenemos a Perrelet en el radar, seguramente sabrás que Turbine es la colección más emblemática de la marca de relojes suiza. Ha sido un buen lienzo para volar la imaginación, de hecho, se han desprendido innumerables variaciones de la carátula inferior (incluso algunas con un mood bastante picante y erótico), que confieren a los relojes efectos visuales siempre nuevos y demuestran la extraordinaria creatividad de los diseñadores de Perrelet.
¿Qué tal na turbina para mujeres? Turbine Lady, con el dinamismo de esta colección y algunos diamantes que nos recuerdan el poder femenino. Cuando la famosa Turbina gira, se revela un mágico brillo.
Hoy, la colección Turbine Lady está disponible en tres nuevos modelos, desarrollados en ocho referencias caracterizadas por colores dominantes y acabados refinados: el Turbine Lady Frost en blanco, el Turbine Lady Eclipse en negro y el Turbine Lady Aurora en tonos arco iris. Renovados en términos de estética y dimensiones, estos relojes están dedicados a las mujeres que buscan relojes con un estilo original y una mecánica sofisticada.
Recordarás que anteriormente este modelo se lucía en 38 o 41 mm, hoy el tamaño es de 37 mm de diámetro. Esto quiere decir que se adapta mucho mejor a las muñecas femeninas. Se presenta con una caja de acero inoxidable, con un tratamiento de PVD negro anteriormente, un bisel plano y una corona bastante prominente, el fondo de la caja estriado y arenado, astas curvadas, pulidas y cepilladas.
En el caso del modelo Turbine Lady Aurora, el bisel está gastado con 56 circonitas multicolor situadas en forma de arcoíris. Cada modelo está disponible con correa de caucho o brazalete de acero inoxidable. Por cierto, por primera vez está disponible con un brazalete de acero integrado con un original diseño de tres eslabones y un cierre de mariposa.
Con un fondo blanco o negro, las famosas aspas giran revelando de manera intermitente los 60 diamantes alineados en 12 filas que le dan una apariencia única a este modelo. Esta tecnología fue patentada en el 2009 por Perrelet, la inspiración viene de las hélices de los aviones, hoy por hoy es un distintivo de la casa relojera. El mínimo movimiento de la muñeca le da una apariencia hipnótica a la carátula.
Aunque la Turbina tiene una función puramente estética, su construcción es compleja. Requiere cinco contrapesos de tungsteno colocados bajo las aspas de aluminio anodizado para permitir que este elemento se mueva rápidamente, se ralentice y vuelva a su posición de reposo. Este dispositivo es un ejemplo más de la excepcional pericia de los maestros relojeros que trabajan en los talleres de Perrelet.
¿Qué hay del movimiento? Animados por un movimiento automático, el calibre P-331-MH es totalmente diseñado y desarrollado internamente, es fabricado por la empresa hermana Soprod, propiedad del empresario español Miguel Rodríguez, dueño de Perrelet.
Cuenta con una reserva de marcha de 42 horas y está equipado con un volante que late a 28.800 alternancias por hora (4 Hz).
Este calibre está doblemente certificado por dos prestigiosos institutos independientes: la certificación oficial de cronómetro del COSC (Contrôle Officiel Suisse des Chronomètres) y la certificación Chronofiable® emitida por el Laboratorio Dubois de La Chaux-de-Fonds, cuyas pruebas aceleran el proceso de envejecimiento de un reloj y simulan los efectos de seis meses de uso durante un periodo de tres semanas.
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