Si eres un entusiasta por los relojes seguramente eres consciente del cuidado que requieren para evitar gastos en un futuro. Te propongo una bobinadora, una herramienta necesaria para el mantenimiento idóneo. No cualquiera.
El uso de una caja de movimiento para los relojes ha abierto un debate, pero concluyo que si tu elección apuesta por la calidad, durabilidad, el uso de materiales innovadores y técnicamente esté respaldada por una marca de prestigio, tu compra será un acierto, es una garantía extendida a tus relojes.
Las características que tenga una bobinadora determinarán el precio, no escatimes en contribuir para alargar la vida de tu guardatiempo. Aquí vale la pena hacer una pausa para decir que no todas funcionan de la misma forma, WOLF por ejemplo, cuenta las rotaciones; otros modelos que encontramos en el mercado simplemente usan el tiempo para estimar los recuentos por día.
Antes de comprar debes de tener en cuenta varios aspectos como la dirección de los giros, es decir si es bidireccional o no, a esto me refiero si el sistema gira a favor y en contra de las manecillas de un reloj. Otro tema es que su uso sea amigable.
Cada reloj tiene un número de vueltas por día necesarias para darle cuerda perfectamente. Solo las bobinadoras de relojes WOLF tienen la tecnología patentada de Turns Per Day para contar el número exacto de rotaciones que necesita su reloj. Una marca de lujo que te aseguro se encargará de evitar posibles daños, dos de los más frecuentes son la magnetización o un exceso de cuerda (los mismos que han generado la polémica en su uso). WOLF lo resuelve.
“WOLF, un instrumento preciso para otro”
Vamos a detalle con las principales objeciones del uso de una bobinadora.
EXCESO DE CUERDA O SOBREBOBINADO
Esto podría provocar un daño interno en tus relojes, como romper o contribuir a la precisión. La patente de WOLF TPD es el temporizador que nos ayudará a determinar el número de vueltas por día que requiere nuestro reloj. Además, es una función programable a través de una app, ¿más sencillo? Seguro que no.
MAGNETIZACIÓN
Algunos relojes están construidos con un alto nivel de protección contra el magnetismo que encontramos en todos lados, en caso de que tu reloj no lo tuviera podría causar estragos si tu bobinadora no tiene la tecnología para evitarlo. En resumen, tendrías una variación en la precisión.
Cuando te hablo de la marca confiable me refiero a que deberías de tener en cuenta cuanto tiempo de experiencia tiene. WOLF tiene 185 años con un constante desafío, el de la innovación en la cual puedes confiar.
En el tema de bobinadoras sin duda obtienes lo que pagas, esto es, siempre es mejor elegir una que te ofrezca mecanismo de seguridad de alta calidad.
Dicho esto, concluimos que no necesitas una caja de movimiento, necesitas un Wolf. Hecho a mano, preciso. Y, igual que tu reloj automático, único.
Si tienes uno o varios relojes WOLF ofrece una diversidad interesante en estilos, colores y materiales, incluso la más pequeña del mundo, la Rocket que es ideal para viajar.
¡No necesitas un winder, necesitas un WOLF”
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