En el fascinante universo de los relojes mecánicos, la combinación de horas saltantes y minutos retrógrados crea una experiencia temporal única. Bulgari presenta el reloj Diva´s Peacock Precious Marquetry con estas dos complicaciones y belleza artesanal.
Este reloj, más que simplemente medir el tiempo, se convierte en un espectáculo de precisión y diseño innovador.
Vamos a detalle con cada complicación. Las horas saltantes rompen con la tradición al no seguir una progresión continua de 1 a 12h. En lugar de eso, las horas parecen saltar en intervalos específicos, llevándonos a una representación visualmente estimulante del tiempo. Esta complicación relojera desafía nuestra percepción convencional, ofreciendo una manera intrigante y diferente de interpretar el transcurso de las horas.
Por su parte, minutos retrógrados; mientras que un reloj convencional avanza linealmente, la manecilla de los minutos, en este caso, retrocede de manera instantánea al llegar a los 60 minutos. Este gesto inusual y visualmente impactante agrega un acto escénico.
La combinación de estas dos complicaciones crea un ballet mecánico en la carátula del reloj. Cada salto de hora y retroceso de minutos es un pequeño acto en la coreografía temporal, recordándonos que el tiempo no solo se mide, sino que también se celebra.
Este reloj es más que una herramienta; es una expresión artística que transforma la simple tarea de leer la hora en una experiencia cautivadora y dinámica.
“Nuestro territorio de origen, la joyería, el arte de crear obras excepcionales combinando oro y piedras preciosas con gran precisión”, Jean-Christophe Babin, Bulgari Beyond Time.
El arte en tu muñeca, el pavo real cobra vida en la carátula del reloj Divas’ Dream, hace gala del savoir-faire con el que la marca está íntimamente relacionada. Con su marquetería tridimensional, el ave despliega su cola como un abanico, reflejando su forma de inspiración antigua en el intrincado detalle de su plumaje.
Cada detalle se despliega sobre una caja de oro rosa, diamantes distribuidos en nevada, aventurina y malaquita embellecen aún más esta magnífica figura.
El verde intenso de la malaquita no solo evoca a la Antigua Roma en donde existía la creencia de que esta piedra protegía contra la mala suerte. El cristal de aventurina, denominado así porque fue creado «per avventura» (por casualidad) en Murano en el siglo XIV, es también un legado de la excelente y polifacética maestría artesanal italiana.
Alberga un movimiento BVL 262 de manufactura. Las horas saltantes aparecen a través de una apertura situada a la altura de 12h. Una manecilla retrógrada situada en la parte superior de la esfera indica los minutos. Para no ocultar la indicación de la hora, tiene un eje de zafiro transparente prolongado por una punta metálica.
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