Los colores dejan su huella única en un estilo, en una época. Para Chanel, forman un lenguaje lúdico que teje un hilo conductor a través de los diversos medios de creación. Esta temporada, la marca francesa redefine sus códigos estéticos: el monocromo, el arte audaz del look integral y giros audaces que crean armonías inesperadas sin complejos.
Ninguna combinación está fuera de los límites, y la idea de dar carta blanca para crear looks de maquillaje en tecnicolor es lo que llevó a Ammy Drammeh, miembro del Estudio de Creación de Maquillaje CHANEL y del Colectivo Cometes, a diseñar la COLECCIÓN PRIMAVERA-VERANO 2025.
En esta colección brillante y alegre, los colores vibrantes contrastan alegremente entre sí o se combinan con suavidad en un look tono sobre tono. Siempre impredecibles, estos tonos atrevidos son la expresión de un estilo atemporal, invariablemente chic y refinado.
Tonos cuyos efectos, que van desde lo luminoso hasta lo empolvado, brillante y mate, evocan lazos de seda, gasa etérea, zapatos lustrados y perlas iridiscentes. Leyendas en color.
Todos los diferentes reinos creativos de CHANEL se mueven armoniosamente en esta colección, conectados por colores que resaltan la piel en su mejor luz: intermediarios que sugieren poesía, delicadeza y naturaleza intacta.
Los looks de la colección se prestan a la experimentación intuitiva y a una personalización sin fin gracias a combinaciones de colores intercambiables, que fueron diseñadas para complementarse entre sí en forma de un lavado de color plano, un halo o una línea simple.
