En el mundo de la relojería es fácil perderse entre tantas marcas y tecnicismos que si no dominamos, nos caen de plomo. Si queremos comprar un reloj, empecemos por entender el tipo de mecanismo que lo anima, aunque podría parecer que son lo mismo -en principio si- y su funcionamiento de base logra la misma precisión, lo cierto es que el movimiento de un reloj cambiará dependiendo del mecanismo que tenga. Reloj manual y automático.
Vamos a empezar. ¿Conoces las diferencias entre reloj manual y un automático?
¿Qué es un reloj manual?
Algunos piensan que son los menos cómodos, sin embargo creo que el acto de darle cuerda a tu reloj es mágico. Pero bien, este tipo de mecanismo tiene un muelle principal como fuente de energía, al darle cuerda (a través de la corona) el muelle se tensa y al volver a la forma original es como va dosificando la energía necesaria para poner en movimiento tu reloj.
¿Qué es un reloj automático?
Si quieres dejar tu reloj un viernes y tomarlo el lunes por la mañana y que esté a la hora, ésta es la opción. Todos tus movimientos serán la energía de tu reloj. Te explico, los automáticos (mecánico) no requieren de ninguna acción manual para darles cuerda, funcionan gracias a un rotor que se da cuerda con los movimientos naturales de la muñeca.
Teniendo estas dos referencias, tú decides cual es tu opción. Algunas personas tienen la falsa idea que los manuales son mejores, no existe tal afirmación. Los relojes automáticos son piezas de alta calidad, no en vano los coleccionistas presumen unos cuantos en sus cajas, imagina la ingeniería que requieren para funcionar por sí solos.